Principales servicios de una funeraria Recogida y traslado del fallecido. La funeraria se encarga de recoger el cuerpo en el lugar de defunción y trasladarlo al tanatorio, domicilio mortuorio, cementerio o crematorio, según corresponda. Acondicionamiento del cadáver. Incluye prácticas como la tanatopraxia y la tanatoestética, es decir, el arreglo higiénico y estético del cuerpo para su exposición. Suministro de féretros y urnas. Proporciona ataúdes, urnas cinerarias y otros elementos necesarios para el entierro o la cremación. Velatorio y ceremonias. Organiza el velatorio (en tanatorio, domicilio o velatorio), así como la ceremonia religiosa o laica de despedida, según los deseos de la familia o del fallecido. Gestión de trámites legales. Se ocupa de la inscripción de la defunción en el Registro Civil, obtención de certificados, permisos de entierro o cremación y otros trámites legales y administrativos. Transporte funerario. Dispone de vehículos autorizados para el traslado del cuerpo y, en su caso, de los familiares. Servicios complementarios. Puede ofrecer venta de flores, lápidas, coronas, asesoría jurídica, asistencia psicológica, publicación de esquelas y otros servicios adicionales.